12 nov 2010
Reinventando los clásicos.
29 jun 2009
Entrada número 100.
Esto es lo que he aprendido:
He aprendido que vivir no solo es ver pasar el tiempo y aceptar con estoicismo lo que la vida te depara, vivir de ese modo es lo mismo que estar muerto. Quien vive sin sueños, acabará soñando con que su vida termine de una vez. La psicología me ha enseñado que las cosas más adictivas son aquellas en las que unas veces se obtiene recompensa y otras no, como por ejemplo las maquinas tragaperras. Estas máquinas tienen tanto éxito porque siempre queda la esperanza de obtener la recompensa. De este modo decidí ser un adicto a la vida, un soñador empedernido. Pero cuidado, también aprendí que toda ludopatía es mala, vivir empeñado en soñar tiene un peligro. ¿Crees que los que juegan a juegos de apuestas realmente disfrutan del juego? La adrenalina que produce la incertidumbre de no saber si se va a ganar o no puede disfrutarse, pero el jugador nunca logra disfrutar realmente pues está demasiado metido en el juego. De este modo aprendí que de vez en cuando es necesario jugar al juego de la vida sin apuestas, simplemente disfrutando del juego con los amigos sin tomártelo tan enserio, pudiendo disfrutar de los pequeños detalles del juego. Aprendí también que el poder es el archienemigo de los soñadores. El poder es el gran corrompedor de sueños, sobretodo si se sueña con tener el poder. A lo largo de estas 100 entradas, pude confirmar este hecho a través de las notas de corte, elemento que usa un poder para cortar sueños y a través del amor esclavizado. Es lo que tiene el poder que todo lo que toca termina corrupto. No obstante descubrí el antídoto al poder, aunque pese a ser antídoto muchas veces terminaba también corrupto, hablo del amor. El amor es el mejor sustituto del poder, por ejemplo si en una comunidad reinase la fraternidad y la amistad ¿Creéis que haría falta el dinero? ¿Creéis que harían falta policías, jueces o leyes? Dos buenos amigos que discuten arreglan sus problemas hablando y si lo solucionan se estrecha más aun su vinculo afectivo. No usan el poder para imponer lo que creen que está bien y lo que no, no se acuchillan en medio de la calle para solucionar un malentendido. El amor une a través de lazos finos que pueden deshacerse fácilmente si realmente se quieren deshacer. Un amigo no es aquel que te impone su poder y te obliga a hacer lo que quieres, un amigo es el que te aconseja lo que considera mejor para ti, pero al final eres tú quien decide. El poder ata con fuertes cadenas de hierro que te impiden ser libre, tomar tus propias decisiones. La libertad, uno de los caminos más rápido hacia la felicidad ¿Por qué no somos libres? El poder, se que suena redundante, pero es que hemos creado un sistema en el cual todo gira entorno a él. Todo bajo los grilletes del poder parece estar seguro, ser fiable y estable. Pero es un elemento problemático, ya que todo no se soluciona con el poder. Me explico, un barrio en el que la mitad del barrio pertenece a gente adinerada, gente con poder, gente de prestigio. La otra parte del barrio son pobres trabajadores que trabajan para los hombres ricos de la otra parte del barrio. Los hombres ricos, presas del poder y de querer ser más poderosos que el resto de compañeros, deciden bajar los salarios a los hombres pobres y aumentarles la jornada laboral. Los pobres que tontos no son se revelan, pero los poderosos, que tontos no son, han creado unas leyes desde las cuales se amparan. Además, tienen el monopolio de los alimentos en los grandes supermercados y en los respectivos huertos en los que trabajan los pobres, con lo cual los pobres no pueden protestar, ya que si lo hacen se arriesgan a perder el trabajo, es decir su comida. Muchos no soportan este ritmo, deciden pasar a otro tipo de trabajos usando una lógica aplastante, si yo no tengo nada y mis vecinos tienen de todo pero no me lo quieren dar, lo cojo sin su permiso y ya está. Nacen así los robos, atracos, asesinatos, etc. ¿De quien es la culpa de los robos? ¿Del que roba por supervivencia? No creo, el problema de los robos reside en el poder. Y curiosamente la gente cree que los problemas que trae el poder se solucionan con más poder. Aparecen así en escena los policías, jueces, abogados, etc. Se controlan las calles con cámaras de vigilancia, los policías no te quitan el ojo de encima y se terminó la libertad, incluso la libertad de expresión. ¿De verdad era tan difícil dar los campos al barrio para que todos pudiesen trabajarlos? De ese modo se hubiesen ahorrado tener que pagar a policías, jueces y abogados o incluso la vida si asaltan tu casa. Pero en fin, ya se apañarán…
Lo que se convirtio en calambur:
Quería hacer un resumen con mis mejores calambures, pero no tenía ni idea de cómo hacer algo diferente con ellos. Pensé que lo mejor sería hacer una especie de rima con mis mejores calambures y algún que otro nuevo. Esto es lo que ha surgido:
Un molde ando moldeando,
moldeo las palabras rimando
No hay manjar más preciado
Que un montón vocablos desbocados
mi consejo, que con tu boca des bocados
se muy bien que de mis rimas vas atiborrarte
mi estilo esa cara de asco va a ti, borrarte
¿Comer esto te dio tedio?
Come día a día esta comedía
También Traje días de tragedias
Las palabras me nombraron conde
Y cuando se es conde uno no se esconde.
¿Dices que de estilo ando falto?
Alto, mi estilo ha dado un salto
Mis rimas se preparan para el asalto
Rompiendo el basalto del asfalto
Para así llegar hasta lo más alto
Dado que esto es tres veces superior
Al estrés que provoca la peor situación
trabajo tras tornos Como el artesano
difundo trastornos Como el perturbado,
Me curré estas rimas gota a gota, miento…
Imperceptible fue el agotamiento.
lo hago bien mientras no me agobien
Esta bien lo afirmo
Tengo alma de niño,
Juego con el lenguaje
Hilo las palabras en telares,
Rimando creo desastres
Pero la calidad de esas tres
telas, es digna de sastres sagaces.
No espero que lo entiendas
Pero esto no lo encontrarás en tiendas.
Si me quieres entender
La clave está en tender
Una mano a la locura
La cual todo lo cura
No lo pongo en duda
Y es que amar cura
La amargura más dura.
Pero ¿que es lo que pasa?
el amor, amordaza.
El amor atado
Se vuelve amoratado
Fruto de una mordedura letal
El antídoto, un amor de duradera lealtad.
A mi corazón por amor tajé
Sufrió, pero nunca lo amortajé
Pues el amor es fruto del sufrimiento
Afirmo que por ella no sufrí, miento…
Hasta desgastar su nombre la llamaría
Que yo sonriese su llama haría
¿sabéis de quien hablo ya? María.
Mi corazón algo tramaría
El muy idiota se enfadaría
Si le besara otra María
Él es feliz con su María
Con ella se consumaría.
Se que María mi corazón quemaría,
Yo Para evitarlo a mi corazón entramaría
Pero este siempre le diría “Entra María”
Y es que incluso mi corazón me timaría
Por su musa, por ti, María.
Quiero que me digan cuenca hueles a María
No por los porros sino por el roce de tu piel contra la mía.
Intento determinar cuando ha de terminar
Esta lingüística maravilla.
Es el fin, pero como tu peor pesadilla
Esto, nunca se olvida.
Por cierto voy a intentar ya que tengo hecho la mitad del trabajo, “cantar” esa cosa de antes con una base estilo rap a ver como queda. Si queda aceptable la pondré aquí.
Lo que ha nacido:
De entre las últimas entradas, surgió un relato que significa muchísimo para mí, el valle de los lobos. Un relato con matices de mi vida, mis reflexiones sobre esta y mi búsqueda hacia Utopía. Os dejo un resumen de lo que llevo escrito.
Entre las cuatro paredes de la vieja casa del valle de los lobos le surgió la idea de construir un mundo mejor a un noble joven, el Poeta. Con la ayuda de sus cuatro amigos (el Ingeniero, el Anarco, el Sincero y la Vehemente) decidió reformar la vieja casa del pueblo. Pero la casa escondía un secreto, viejos recuerdos de la guerra civil española. Un libro “Nuestro viaje a utopía” fue el que animó a los jóvenes a emprender su propio viaje hacía Utopía. La incorporación de una nueva vecina, Discordia, traerá muchos quebraderos de cabeza a los jóvenes. Hará todo lo posible para impedirles construir la ciudad de utopía en el placentero valle de los lobos.
El resumen me ha quedado un poco soso. Pero lo que importa es que a partir de ahora los capítulos ya no tendrán tanta relación con mi vida, la historia empieza a cobrar vida por sí sola y se aleja de la mía. A partir de ahora lo que pasará en el valle de los lobos irá guiado por mis sueños, por como quisiera yo que fuesen las cosas en ese magnifico valle. Soltaré una exclusiva para mis lectores asiduos. Va a pasar algo grande en los próximos capítulos, algo por lo que puedo ser criticado, pero creo que una buena forma de dejar las cosas más o menos claras. La cosa recae sobre el Poeta y la Vehemente, pero conecta con todo el grupo. Solo diré que es una buena forma de luchar contra Discordia, ahí lo dejo todo…
Los que lo han hecho posible:
No me iba a olvidar de vosotros chicos y chicas, todos aquellos que han leído y comentado mis entradas. Os lo digo ya, si no hubiese sido por vosotros no estaría escribiendo la entrada número 100 y con vosotros a mi lado, espero que nos leamos en la 200. Muchas gracias de verdad, no sabéis cuan gratificante es el apoyo y la dedicación que me dais. He de dedicar esta entrada en especial a L. a Ana y a la Loca de los Gatos. La tríada de chicas que más textos han comentado, por no decir todos, jeje. ¿Qué haría yo sin vosotras? No sabéis lo gratificante que es estar escribiendo un texto y pensando en lo pensareis al leerlo. Tener la seguridad de que siempre estaréis ahí para comentarlo todo, no tiene precio. Por no decir que aprendí muchísimo de vuestros blogs y que seguiré pasando por ellos y comentándolos pase lo que pase, porque esos textos vuestros merecen ser comentados. Un beso o un abrazó, o las dos cosas, a todos los que se dejen caer por aquí.
P.D.: Muchas gracias chicas.
6 may 2009
La cuenta calamburiana

Como los tunos que no cantan bien si están acatarrados, me estreso cuando no hago bien esto. Mi lengua evacua trozos de números bañados en zinc o en plata, los evacua antes de que llegue el seísmo lingüístico. Si ET está pocho, con este calambur le dejaré nuevecito. Ni diez mares podrán diezmar el brillo del bronce con el que baño este texto. He plantado cerezos, para que, entre cerezos, nos besemos y así mi corazón nunca torcerá su camino hacia tu sonrisa. Tú radiante, yo vestido con esmoquin, cenamos y a partir de aquí no sigo “calamburizando” números, pues todo es muy monótono…Dieciséis, diecisiete, dieciocho, diecinueve… el veinte no ve intención de ser “calamburizado” pero se equivoca. Acabo aquí antes de armarme un lío con las cuentas…
23 abr 2009
Cartas de corazones... rotos.
Ando desilusionado y es que jugué una importante partida de cartas contra una amiga, nos lo jugábamos todo a una partida. Tenía buenas cartas, pero mi amiga me dejó bien claro que no tenía posibilidad alguna, así que abandoné la partida sin lugar a duda. Pensé que cuando ya se da todo por perdido uno no pierde nada por mostrar sus cartas, yo no soy de los que su orgullo les impide mostrar al resto sus cartas. No lo hago por mostrárselas a mi rival, supongo que a ella mis cartas le dan igual, lo hago por mostrárselo a los espectadores y que puedan aprender algo. Sin más dilación, estás son mis cartas:“Muchos dicen que su desayuno ideal son galletas María y Nocilla.
Pero se equivocan mi desayuno ideal son galletas, María y Nocilla. Combina esos tres elementos como quieras y tendrás una buena dosis de alegría nada más empezar el día.
La llamaría hasta desgastar su nombre, su llama haría que brillase mi sonrisa y a María amaría. Embalsamaría mis sentimientos hacia María y los mandaría a un lugar seguro, de ese modo, en balsa, María llegaría a mi corazón. Mi corazón se inflamaría, pero me da igual si lo infla María y es que mi corazón con su María se consumaría eternamente. Se que María quemaría mi corazón con su fuego, pero con palabras puras como la cal, María, calmaría mi corazón con maestría. Para proteger a mi corazón e impedirle el paso a María yo entramaría mi corazón, pero este siempre le susurraría “Entra María.”. Y es que incluso mi corazón me timaría por ti, María…
Mi humilde sueño es que mis amigos me digan “Cuenca, hueles a María.”
Y no por fumar porros, sino por el roce de tu piel contra la mía…”
Estas han sido mis cartas, buenas o malas, no lo sé… Lo único que sé es que quedarán guardadas en un rincón oscuro, como un vago recuerdo de otro amor platónico encerrado en el corazón. Como otro amor platónico que me corta las alas y me deja sin ilusión…
14 abr 2009
Un nuevo calambur: El amor macabro.
Cuentan que una persona muy amoral vio a una joven hermosa que amortajaba a los difuntos en una funeraria. Él solo quería morar en el corazón de la joven. Ella se sentía amordazada por otra persona y le tuvo que dar calabazas al pobre amoral. Pero una pasión un tanto amorfa empezaba a metamorfosearse dentro del joven convirtiéndose en deseo. Un día, mientras recogía flores para su amada, una serpiente venenosa fue a morder su zapato. Pero el zapato no pudo amortiguar la mordedura. El amor de duradera felicidad, resultó ser una mordedura mortal, pues la amoratada mordedura le llevó a la morgue y allí le esperaba ella. La joven comprendió que el amor atado se vuelve amoratado a causa de la presión hasta que finalmente muere por asfixia. Ella le quería, pero se sentía atada a otra persona y su amor murió con él. Le amortajó con lágrimas en los ojos y por amor, tajó sus venas y murió abrazada a él. Esta morbosa imagen cierra esta historia, tan macabra y llena de amor al mismo tiempo.
5 mar 2009
Una de nombres "Calamburianizados".

Esto es una fiesta y estáis todos invitados, pero antes toca pasar lista:
No podemos empezar la fiesta sin Tomás, padecía los primeros síntomas del resfriado, pero seguro que vendrá. Con suelo firme por delante, llega muy segura Consuelo. Acaban de llegar Ángel y Carmen y van a buscar a Iván y a Angélica (ármense de paciencia con este cuarteto). ¿Le toca entrar a María? No, a Mariano. Sucia o limpia, llega Olimpia. Di ego a Diego al invitarle a esta fiesta. Bueno, pasen todos adentro sin retenciones, ni colas y, Nicolás, por favor, no te retrases. Siéntense todos en la mesa para la cena, pero ahí no hay suficiente espacio para que se siente Ainoa. Podemos empezar a comer esta rica lasaña ¿y si doro un poco más la lasaña de Isidoro? Hay tortas, para Aitor, tras horas de trabajo. Tras la cena unas copitas, pero Eloy dijo que él hoy no podía traer hielos. No pasa nada, en esta fiesta dan hielo aquellos que se llaman Daniel o, por otra parte, dan té los que se llaman Dante. Tras beber varios cubatas, a gatas andán todas las Ágatas. A altas horas llaman a la puerta ¿Será Fina o Serafina? Tal vez sea Omar, o Mar. Amaría a Maria con pasión irrefrenable. Pasión, es describir esta fiesta y dolor, es no poder hablar con Dolores. Di, Ana, qué te parece esta diana lingüística llenita de nombres sobre la cual lanzo mis afilados vocablos. Lo justo es terminar con el nombre de Esther. Minar las palabras es un arte, no lo olvidéis…
(Siento no haber podido incluir muchos nombres, los que se han quedado fuera, también quedan invitados a la fiesta por supuesto. Si encuentro más Calambures con nombres iré añadiéndolos a la fiesta.)
28 feb 2009
¿Como entender mis Calambures? Simplemente, tenéis que estar locos.
Para entender este texto la clave está en tender una mano a la locura. Lo cura todo la locura, no lo pongo en duda. Que no siga leyendo quien no vea las dos alas de esta frase, pues no entenderá el resto del mensaje. Si no habéis visto las alas, tal vez hayáis visto las salas. Si no habéis visto nada, alto, mis palabras han dado un salto ¿irán a asaltarte o a saltarte? Resalto, que es alto el salto que mi nivel ha dado. Meto dos métodos en este texto: el primero es la fusión de palabras, el segundo la confusión de términos. Crear confusión con fusión de palabras, ese es el objetivo que intento proteger, aun por encima de los pros y los contras. Como Pro, tejer palabras para crear tan extraños telares, como contra, mares de delirios. Pero con tramar esos urdidos telares lingüísticos soy feliz. La clave de estos textos son mis trastornos y es que tras tornos moldeo mis textos. Siempre un molde ando moldeando, moldeo las palabras para que encajen en mis textos. Comprende que de mi boca, bloque a bloque salen Calambures. Compren, de esta cesta, un vocablo, que hay oferta dos por uno y por cada vocablo te llevas otro de regalo. Levitan en mi interior dehesas llenas de buenas vibraciones. A este texto, le vi tan apagado que deje que se contagiara de esas vibraciones. ¿Te dio tedio, el simple hecho de leer esto? A mi me la suda, se que algunos pensarán que no lo hago bien. Pero, no lo agobien, mi talento madurará con el tiempo como el buen vino. ¿Como que no hay vino? En este banquete, el novio, no vió vino y yo no vi ovino que servido en la mesa no fuese acompañado de buen cava o vino, aunque por lo menos estuviese escondido dentro del mismo ovino. Yo, no lo moví, no, pero de su lomo vi salir vino. Por fin encontré el vino escondido en el lomo de la palabra ovino. Intento determinar cuando ha de terminar esto, aquí termino, creo que he bebido demasiado vino, pero aun así, no se me traban las palabras…
24 feb 2009
Los origenes de mis Calambures.

Cuando algo gusta, creo que es apropiado hablar de sus orígenes. Además siento la necesidad de explicar de donde saqué ese afán por ese juego de palabras. Como todo “escritor” que se precie, tomé la técnica de los grandes escritores o poetas de la historia. En mi caso fue Quevedo, un cachondo mental, que se apostó con un amigo que era capaz de llamar coja a su Majestad (evidentemente su Majestad era coja, sino no hubiese tenido gracia la cosa.) Para ganar la apuesta se plantó ante ella con un clavel y una rosa y le dijo “Entre el clavel y la rosa, su Majestad escoja” Obviamente la frase que ganaba la apuesta era esta “Entre el clavel y la rosa, su Majestad es coja.” Pero a ver quien le reprochaba algo. Ganó la apuesta con sutileza y a mí me hizo gracia, pero pase un poco del tema con el tiempo. (Todo esto me ha servido para encontrarle el nombre a este juego de palabras, se llama Calambur, que en italiano significa bromear con la pluma.) Con el tiempo me llegó un verso de Antonio Machado: “Entre el vivir y el soñar hay una tercera cosa. Adivínala.” No dijo nunca la solución a esta adivinanza, o sí, la cuestión es que todos andan tratando de adivinar esa tercera cosa. Unos dicen que es el amor, otros la felicidad. Yo creo haber encontrado la palabra que más encaja en todo esto, la hiel. La amargura, y supongo que cuando uno está entre vivir o soñar, se puede sentir un poco amargo. O cuando despierta de un magnifico sueño y vuelve a la cruda realidad. Con este nuevo Calambur, me dije "esto mola, vamos a ver lo que puedo hacer yo". Bueno, pues eso es todo amigo, seguiré dándole a la cabeza para hacer más Calambures.
22 feb 2009
Amor incomprendido, amor en estado puro.

Es insoportable la grima que da una lágrima de tristeza en tu rostro. Prefiero que rías ¿querrías hacerme el favor de no volver a llorar nunca? No encuentro palabra que te defina, ni siquiera aquella que está hecha de fina seda, la palabra…amor. A tu lado se incrementan mis sentidos, sentí dos sentimientos al verte, amor y felicidad, sin ti, dos palabras sin sentido. Me invade la felicidad cuando construyo este tipo de textos, encontrar las palabras adecuadas es como encontrar un tesoro, tu tez, es oro de un valor incalculable. Con venir a mi lado, podremos convenir que el amor es lo más valioso del mundo, porque sin ti me siento como algo colorido que te tiene el color ido, es como si me faltase lo que me define. Defines miles de fines y usos que darle al amor, de todos ellos me quedo con la finalidad de poder hacerte feliz, amor. Se que con moverte un espacio en este texto puedo conmoverte, eso es como verte definida en este texto. Te veo definida aquí, porque este texto es como tú, algo consentido y con sentido, amor...