9 feb 2009

Vidas ajenas.

Vida de perros.

En una vida de perros, el poder es la base del sistema. Sistema piramidal, como no, los de abajo (Pobres sin poder) mantienen a los de arriba (Personajes poderosos). Los perros solo sueñan con escalar socialmente, todo perro se ha planteado ser alguien en la vida dejar su huella. Admítelo, tu también lo has hecho, todos lo hemos hecho. El sueño del perro le llaman, todo perro sueña con ganar respeto y estar por encima de los demás. Esa obcecación por el poder, les vuelve ambiciosos, peligrosos. Las mentiras y los fraudes les ayudan a mantener su poder, sin saber que las mentiras crean desconfianza por parte de los demás perros. La desconfianza crea seres introvertidos, que esconden sus palabras en lo más recóndito de si mismos, por miedo a que los demás les juzguen o les mientan. Cuanto más introvertido sea un perro más poder podrá conseguir, un ser que solo confía en si mismo y solo lucha por si mismo sube rápido en la escala social, aunque sea pisoteando a los demás. Los genios tienen miedo a hablar con los demás de sus ideas, muchas se pierden por culpa de la desconfianza. Grandes genios, inventaron muchas cosas para pasar a la historia, para conseguir el sueño del perro, aun teniendo que renunciar a una parte de si mismos. Las cosas en la vida de los perros funcionan gracias a ese sueño, a ese afán por el poder. La tecnología, la ciencia, todo se desarrolla acorde con este sueño. Pero cuidado, muchos inventos y descubrimientos permanecen en silencio por miedo a arrebatar el poder de otro. Tal vez un combustible ecológico, que solo aparecerá en el mercado cuando el petróleo se acabe ¿Quién sabe? En esa pirámide, el que está por arriba manda de el que está por abajo y obviamente no va a permitir que los de abajo le arrebaten el puesto. Hoy en día, la religión empieza a bajar peldaños rápidamente y cada vez parece tener menos importancia. Por otra parte la ciencia va escalando. A los perros les venden que el trabajo es el único medio de escalar rápidamente en esa pirámide en la que los que están por debajo se pudren en la miseria. Pero en realidad el trabajo no es más que un instrumento de los de arriba para mantenerse arriba gracias a los de abajo. ¿Por qué no se revolucionan los perros de abajo para derrocar a los de arriba? Por miedo al poder. Los de arriba tienen aliados que mantienen el orden y la justicia, lo tienen todo pensado. Por si fuera poco, mantienen contentos a los de abajo con comodidades y falsas ayudas y promesas, así calman los humos de revolución. Si por alguna de aquellas los de arriba se equivocasen, no pasaría nada, ya que ellos tienen el poder, los culpables siempre serán aquellos que tengan menos poder. Como veis tener poder en esta sociedad es realmente muy tentador, lujos, privilegios, seguridad. Pero, como es normal, los pobres también quieren poder y pasa lo que pasa. Guerras, asesinatos, maltratos, esclavitud, robos y un largo etcétera son el resultado de ese afán por el poder. Los perros no solo tienen que sobrevivir en la vida, también han de hacerlo en ese duro sistema en el que solo sobreviven los “mejores” (los más poderosos) Así es la vida en el mundo de los perros ¿Les suena de algo?

La vida de los lobos. La vida de un lobo es tan extraña como fascinante. En la vida de un lobo, el amor es la base del “sistema”. Una sociedad completamente llana, une a los individuos. Todos buscan el amor, todos buscan el sueño del lobo, amar por encima de todo. Para un lobo no existen fronteras, no existen peldaños, nada obstaculiza su afán por amar a los demás. Todos están unidos, todos están en contacto y sin embargo no hay roces que acaben en tragedia. Al no haber nadie por encima de nadie, no existen las mentiras y la avaricia para escalar socialmente. La sinceridad y el respeto es la moneda de cambio, los más afortunados son aquellos que se mantienen unidos, en manada. Los lobos son extrovertidos, le dan más importancia a compartir sus emociones y sus sentimientos con los demás que reprimirlas en su interior. Ese afán por darse a conocer, por amar a los demás les lleva a la felicidad. Se sienten seguros como manada, saben que alguien en la manada les ayudará cuando las cosas vayan mal. Sin falsas promesas, con actos, actos que no tendrán que ser rogados. La manada se implicará a fondo para que todos puedan estar a gusto, ya que eso garantiza su futura felicidad en tiempos duros. Los lobos trabajan en lo que quieren trabajar, hacen lo que quieren hacer y esto les proporciona el bienestar que merecen. Sin lujos ni caprichos, de nada sirven los lujos si no tienes a nadie con quien compartirlos, por eso los lobos les dan más valor a los amigos y a los amantes que a cualquier otra cosa en el mundo. Los lobos conocen una ecuación mágica que dice “haz un favor a un lobo y él te devolverá dos. Pero si pudiendo ayudarle no le ayudas, aunque algún día le pidas ayuda dos veces, no te hará caso nunca.” De ese modo los lobos se aseguran de que el amor no pueda comercializarse ni convertirse en poder u elemento represor. Es la supervivencia de aquellos que ayudan a garantizar la supervivencia de los demás. Cuanto más ayudes, más te ayudarán. ¿No pensáis que esa sería una vida perfecta?

Vistas ambas vidas y experimentadas solo una. Tal vez solo quede preguntarnos ¿Por qué seguimos siendo perros? ¿Por qué conociendo la clave de la fácil supervivencia, preferimos seguir el dictamen de la supervivencia del más fuerte? Tal vez sea por miedo a lo desconocido, quién sabe… Tal vez el ser humano sea perro viejo al que ya no le puedes enseñar trucos nuevos…

2 comentarios:

Ácrata dijo...

Un gran ejemplo de lo que es y lo que debería de ser.

Vida de lobos, quien la pillara... lástima que sea demasiado utópico.
Pobres perros de arriba... se creen que por conseguir más poder van a ser más felices, va a ser fuerte la caida cuando se den cuenta (si se dan) de que teniéndolo todo no tienen nada y que han vivido sin vivir...

Besoss!

cuenk dijo...

Fíjate, a mi cada día que pasa me resulta menos utópica. Como cada día lo veo peor, pues supongo que aunque sea por ser la última opción, la vida de los lobos está cada vez más cerca. El problema es que al parecer a poca gente le interesa ver venir las cosas. No ves que todos siguen al rebaño. Tal vez el problema venga cuando las cosas les pillen de sopetón, en fin. Lo bueno es que a nosotros todo esto de los lobos no nos vendrá de nuevo, jeje. Besos.